El 18 de diciembre se conmemora el día internacional del migrante, fecha propicia para tener presente la importancia de proteger su dignidad, garantizar los derechos, promover la integración de todas las personas sin discriminación y reafirmar el compromiso con el respeto, humanidad, y responsabilidad compartida, que nos permitan comprender el fenómeno migratorio, lo que es clave para diseñar un futuro más humano.
Este día se conmemora por decisión de la asamblea general de las Naciones Unidas del 4 de diciembre del año 2000, fue escogida esta fecha porque ese mismo día del año 1990 la ONU adoptó la Convención Internacional sobre la protección de los derechos de todos los trabajadores migratorios y de sus familiares, tratado clave para garantizar trato digno y condiciones laborales justas.
Los principales objetivos del día internacional del migrante son reconocer sus contribuciones, económicas, sociales y culturales, visibilizar sus desafíos, discriminación, Xenofobia, trata y tráfico, explotación y violencia, promover políticas migratorias seguras, ordenadas y regulares, proteger derechos y garantizar condiciones humanas en las fronteras.
La fecha busca reconocer la dignidad de los migrantes, visibilizar sus desafíos y destacar sus aportes a las sociedades, hoy que millones de personas se han visto obligadas a desplazarse por diferentes causas, debemos mirar la migración no desde el miedo sino desde la justicia, no desde la desinformación, sino desde la dignidad, no desde la indiferencia, sino desde la solidaridad.
La migración como tal es un fenómeno histórico, global y estructural, producido por personas con historias, familias y derechos, que abandonan sus hogares no por gusto sino por necesidades, esperanza o supervivencia, en busca de un futuro mejor, su movilidad es parte esencial del mundo que compartimos, por lo que defender sus derechos es una responsabilidad de todos.
La historia de la humanidad es una historia de migraciones, ningún país, ninguna cultura y ninguna civilización se ha construido sola, lo que hoy somos como sociedad es el resultado de generaciones que se movilizaron en busca de una vida mejor, por lo que es un deber defender los derechos humanos de todas las personas migrantes sin excepciones, lo que sería proteger la humanidad que todos compartimos.
Los días internacionales son una excelente oportunidad de sensibilizar al público en general, sobre temas de gran interés y este día que comentamos el día internacional del migrante, es una excelente oportunidad para resaltar las contribuciones de millones de migrantes en todo el mundo y el entorno cada vez más complejo del tema migratorio, la gobernanza y la cooperación internacional.
El tema migratorio implica desafíos como la integración, derechos humanos, gestión de fronteras y la necesidad de cooperación internacional y políticas sostenibles para una migración segura, ordenada y digna, incluyendo tanto flujos voluntarios como forzados, que garanticen derechos y seguridad para todos, que eviten crisis humanitarias y la desintegración familiar.
La migración fenómeno antiguo, humano y universal nos involucra a todos, la movilidad global va en aumento y hoy en día más de 300 millones de seres humanos viven fuera de su país de origen y la cifra sigue aumentando, lo que es posible por la falta de oportunidades, los insuficientes empleos, bajos salarios, alto costó de la vida, inseguridad, violencia, persecución o guerra.
Vivimos en un mundo muy inestable, marcado por crisis económicas, conflictos, violencia, afectado por el cambio climático y profundas desigualdades lo que hace que millones de personas se vean obligadas a abandonar sus hogares buscando seguridad, trabajo y dignidad, esta mayor movilidad global ha consolidado la migración como un componente esencial del sistema internacional contemporáneo.
El día del migrante no es una fecha simbólica es un recordatorio global de que la movilidad humana se ha convertido en uno de los fenómenos más significativos del siglo XXI y no es una amenaza, es una realidad mundial, un motor de desarrollo y una expresión de esperanza, por lo que debemos proteger sus derechos, combatir la xenofobia y construir rutas seguras y dignas de movilidad humana.
La migración es una respuesta humana frente a las crisis del mundo, en este día internacional del migrante debemos reconocer que la migración es un acto valiente ante la adversidad, ninguna crisis justifica negar derechos, cerrar puertas o criminalizar esperanzas; el respeto a los derechos humanos, la solidaridad, la humanidad y políticas públicas justas y realistas son la única garantía de proteger la dignidad humana.
Por Luis Fernández
El autor es político, escritor y comunicador