Moca, Espaillat.-En el corazón del municipio de Moca, provincia Espaillat, se extiende una galería a cielo abierto que ha transformado las calles en lienzos vivos: la Ruta de los Murales.
Esta iniciativa, surgida como una propuesta cultural para rendir homenaje a figuras destacadas del ámbito local, nacional e internacional, ha sido ampliamente valorada por la población mocana.
Es un recorrido que no solo embellece, sino que educa, evoca memoria, y proyecta la riqueza humana del municipio y la provincia hasta la costa norte.
Los murales representan a personalidades relevantes del arte, la cultura, la ciencia, los deportes, religión, la gastronomía y la historia. Desde héroes de la independencia hasta músicos, poetas, científicos, atletas y cocineros tradicionales, cada obra es un testimonio visual de identidad y orgullo colectivo.
Este esfuerzo no solo da vida a espacios públicos, sino que también rescata historias que muchas veces permanecen olvidadas en los márgenes de la memoria social.
La Ruta ha sido recibida con entusiasmo por la comunidad. Familias, estudiantes y visitantes encuentran en estos murales una forma distinta de aprender sobre su historia y sus referentes.
La estética vibrante de las obras invita a recorrer las calles, a detenerse, a contemplar y a conversar. Este diálogo entre arte y ciudadanía fortalece el sentido de pertenencia y orgullo de la mocanidad.
A pesar del aprecio generalizado, la Ruta de los Murales enfrenta un problema serio: la falta de cuidado y atención por parte de las autoridades locales y de la comunidad en general.
Algunos murales presentan signos visibles de deterioro por exposición al clima, áreas descuidadas y abandono de sus entornos. Además, no existen suficientes iniciativas para promover este patrimonio artístico, ni a nivel local ni fuera de la ciudad.
Los espacios no están debidamente señalizados, no hay rutas turísticas formales ni material informativo actualizado. Tampoco se realizan actividades culturales que mantengan viva la conexión con este proyecto. Es decir, aunque los murales están ahí, su potencial como recurso cultural, educativo y turístico está siendo desaprovechado.
Reconocer para preservar
Valorar esta iniciativa implica también reconocer la urgencia de cuidarla. La Ruta de los Murales debe convertirse en un proyecto sostenible, con políticas claras de mantenimiento, promoción y participación ciudadana.
La integración de escuelas, organizaciones culturales y empresas locales podría ser clave para revitalizar este recorrido, convertirlo en punto de interés nacional y proyectarlo como un ejemplo de identidad y memoria urbana.
La Ruta de los Murales en Moca, no es solo una manifestación artística, cultural e histórica; es una declaración de respeto hacia quienes han aportado al desarrollo y la historia del país. Preservarla es un deber colectivo. El arte que homenajea merece también ser homenajeado con atención, promoción y cuidado.
Por Luis Ramón López